domingo, 26 de abril de 2015

Un Hondureño Impresionante, Fundido en Valores, Digno de Admirar y seguir

Roberto Contreras

Es increíble como los valores pueden cambiar el horizonte de las personas, te invito a leer este artículo que me ha dejado impulsado a realizar mis sueños, sin importar en que circunstancia me encuentre.


He encontrado un artículo donde sobresale un Hondureño de Respeto, Valentía, Liderazgo y con un amor indescriptible hacia su familia; como muchos Hondureños han salido adelante por su implacable conducta moral, cabe destacar a este hombre que pone en alto el corazón de cada uno de las Hondureños y Hondureñas.

Y por supuesto un ejemplo a seguir para aquellos que creen que ya no hay esperanzas, o que ya todo está perdido.

Roberto Contreras nació en Honduras. En su vida ha tenido que superar obstáculos, desde niño, cuando murió su padre, dejo a su madre sola para criar a sus cuatro hijos. Siendo un muchacho, el mostro ávido interés en su tarea escolar, aunque los estudios no eran de ala prioridad en su casa. Además de estudiar, trabajaba todas las mañanas, vendiendo periódicos en las esquinas y lustrando zapatos antes de ir a la escuela.

Cuando su madre se casó de nuevo, Roberto fue a trabajar con su padrastro en las plantaciones de banano, la principal industria del país durante su infancia. Su trabajo consistía en cargar el camión de su papa con plátanos considerados demasiado pequeños para la exportación. Las plantaciones les pagaban por cada camión que Roberto y su papa llenaban. Los plátanos luego eran revendidos en los mercados locales.

A pesar de tener que trabajar y estudiar desde una temprana edad, Roberto se graduó de la escuela secundaria con muy buenas notas. Una vez que se graduó consiguió trabajo en un banco, con la idea de aumentar el dinero que podía aportar a la familia. Con el dinero que había ganado en el banco, compro su propia cama cuando tenía solo 18 años.

El invirtió mucho tiempo y trabajo aprendiendo los detalles de su oficio, lo que comenzó a atraer el interés de algunos de sus supervisores. Uno de ellos estaba tan impresionado son su trabajo- y el esfuerzo que ponía en su trabajo – que ofreció pagar por sus clases de inglés. Roberto se casó con su novia del colegio, y entonces comenzó a pensar en un negocio propio.

El siempre creyó que los hombres deben hacer el trabajo que les satisface. Al principio, comenzó a vender zapatos y abrió un par de tiendas, mientras que su familia aumentaba. Pero se dio cuenta rápidamente de que le era casi imposible competir con los precios ofrecidos por las otras tiendas.

¿Por qué un joven que ya había superado tantos obstáculos decidió que no podía competir? Con el fin de mantener sus precios bajos, las otras tiendas practicaban la evasión de impuestos. Roberto sabía que no podía imitar esa forma de hacer negocios, ya que iba en contra de sus principios. Y comenzó a pensar en otra manera de hacer dinero.

Analizo las fortalezas y debilidades. ¿Qué tipo de trabajo quería hacer por el resto de su vida? Después de pensarlo cuidadosamente, decidió que quería abrir un restaurante típico de comida hondureña. El oro por una dirección a seguir y decidió comprar un terreno donde construyo su primer restaurante. El cual lo llamo “Power Chiken.”

Contreras tenía valores positivos, que convirtió en decisiones positivas:

  • ·         No malgasto energía en quejarse por las desgracias de su infancia.
  • ·         Ayudo a sostener a su familia
  • ·         Trabajo duro, aun cuando el jefe no estaba allí
  • ·         Llego siempre a tiempo a su trabajo
  • ·         Su jefe podía confiar en él, por qué el hacia lo que dijo que haría
  • ·         A pesar de los obstáculo, el no descuido su educación


Debido a que él se había entrenado a sí mismo en los hábitos de trabajo duro, rapidez y diligencia mientras era todavía joven, Contreras transfirió estos valores a su negocio, asegurando que Power Chiken fuera un restaurante de calidad.

El Sr. Contreras no eligió perder a su padre cuando solo era un bebe, o a crecer en la pobreza. Pero al abrazar los valores como trabajo duro, responsabilidad, educaciones y honestidad, y viviendo de acuerdo con esos valores obtuvo el control de su propio comportamiento – y su propio destino.

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